2021/10/20

Administración De La Espiritualidad


Lectura: Eclesiastés 12:13-14
El énfasis que conviene representar en la presencia gira alrededor de dos dimensiones expresadas dentro de Salomón en Eclesiastés 12:13-14, y son: Teme a Dios (cultiva tu espiritualidad) y guarda sus mandamientos (cultiva tu letra). Estas dos dimensiones son inseparables. Lo espiritual afecta el evolución del letra; e la forma como se gestiona la presencia (pensamientos, emociones e voluntad) facilita y conecta con la dimensión espiritual. El monarca Salomón opinaba que el verdadero éxito, la verdadera satisfacción y el verdadero sentido de la existencia, van de la mano con la práctica de la espiritualidad. La fortaleza y poder de una persona tienen su raíz en su espiritualidad. Su poder interior fluye de su letra; y éste, a su vez, se alimenta de su espiritualidad. Podemos comparar este proceso al de un árbol. La principio del árbol es el medio atravesado el que la planta puede obtener del piso los nutrientes y el agua que necesita para alimentarse, progresar y fructificar. El resultado del árbol (cualidad, pureza) es determinado a través de la raíz, pero ésta necesita del suelo circundante para tomar el agua y los nutriente. Y el conducta y las actitudes del marido son determinados por su letra. Lo que es la raíz al árbol (canales de sustento y estabilidad), lo es el letra al marido (identidad propia, conciencia de sí mismo, valores, emociones, voluntad). Ahora, es su espiritualidad (su profundidad e madurez espiritual) lo que le da vivencia a la raíz (su letra).

Para reflexionar: Cuando cultivamos nuestra espiritualidad, nuestro carácter se fortalece. Por el contrario, cuando nos apartamos de nuestras raíces espirituales, las debilidades de nuestro letra se hacen evidentes. 

Arnoldo Arana. Valencia - Venezuela