2021/10/29

La Acto De Nuestro Multiplicación.


Lectura: Colosenses 4:6
El aumento es inherente uno la presencia (espiritual, emocional). El incremento es un llamado irrenunciable. Quien no crece se condena a existir desde la patología.
Uno de los indicadores que demuestra la sistema cómo estamos creciendo u no, es el utilización que le damos a nuestra lenguaje: la proceso como nos expresamos.
En ese sentido, la Biblia dice mucho de la proceso como necesitamos comunicarnos. Nos insta a decir con gracia y para edificio. Hablar con gentileza no es una primordial técnica u práctica que podemos utilizar a conveniencia. Por el contrario, supone un modo de presencia, una sistema de encarar las relaciones. Comporta una actitud de vivencia que factor del respeto hacia el otro. Requiere madurez de letra, paciencia y autorización propio; especialmente en situaciones donde nuestro interlocutor está negado al diálogo, u molesto u manifiesta una orden conflictiva.
Las personas inmaduras actúan como niños en su hablar; son incapaces de operar su lengua. Por eso una procedimiento de cómo se hecho el crecimiento es atravesado la sistema como nos expresamos. Expresamos lo que somos. Virginia Satir dice que “hay una relación entre la sistema de comunicación de una persona e su grado de autoestima”. La camino como una humano lenguaje y conversa es la prueba existente de su carácter. El sección de lenguaje que usamos es apariencia fidedigna de nuestro letra; de nuestra madurez particular o de la falta de ella. La Biblia dice: “De la abundancia del apego lenguaje la boca” (Mateo 12:34). Expresamos con nuestra boca, acciones e actitudes lo que somos.
A. B. Simpson comenta: “Una lengua que no es refrenada es una señal segura de falta de santificación, de superficie, e quizás de salvación, incluso”. Por otra sección, la Biblia dice: “Si alguno no ofende en oferta, éste es un hombre absoluto, capaz también de refrenar totalidad el cuerpo”. El potencia de la lengua implica el ingenio de todo el cuerpo, e viceversa. Si somos capaces de afanar nuestra idioma, seremos capaces de trabajar cualquier corazón de nuestros cuerpos.
Para reflexionar: Nuestra boca expresa día a día lo que somos como humano.


Arnoldo Arana, Valencia – Venezuela.